Muere la osa Tola, uno de los iconos de la conservación de la especie

El animal, de 29 años, presentaba una lesión crónica que se agravó durante estas últimas fechas

La osa Tola murió el pasado 18 de enero en el cercado de Proaza, que gestiona la Fundación Oso de Asturias, con 29 años, una edad muy avanzada para este tipo de animal cuya esperanza de vida oscila entre los 20 y los 25.

Tola y su hermana Paca se convirtieron en un símbolo de la recuperación faunística y medioambiental de Asturias tras haber sido rescatadas en 1989 de cazadores furtivos que habían matado a su madre. Desde 1996 vivía en el cercado de Proaza, habilitado con criterios de semilibertad, una vez descartada toda posibilidad de reintroducirla en el medio natural.

Durante los últimos años, Tola estuvo sujeta a cuidados especiales debido a las dificultades motrices que sufría, si bien el progresivo deterioro que experimentó las últimas semanas fue debido a su avanzada edad.

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